Me adentré de una vez a las esculturas de los antepasados, todos los contextos históricos pasaban amontonados en grises hojas donde se encontraban personajes con expresiones severas, el mismísimo hércules tratando de derribar al enemigo, Da Vinci cultivando sus diversas y peculiares artes, Diego de Almagro descubriendo la gran franja Chilena, demasiados seres que sería imposible nombrarlos todos aquí, de ellos no sé absolutamente nada, sólo la acción que los llevó a la cima y al recuerdo eterno en las galerías más destacadas. Cuanto hubiese querido conocer el escenario, sentimientos e ideales, los historiadores no se ponen de acuerdo y llegan a evocar un lugar con polvo y difuso, con miles de telarañas en la cronología del tiempo. Por eso, todos aquellos héroes permanecen paralizados en mi conciencia, de ahí que los llamo "ESTATUAS" y que mi cerebro es un "MUSEO" pero ha llegado el momento de estudiar mi propia vida, confrontaciones, batallas cruentas, caídas, amores tormentosos,tristezas y alegrías, todo lo que cabe dentro de la elevada psique de un humano. Cuando finalice mi análisis autobiográfico, destruiré individuos creados por mi intelecto, no son más que almas tratando de desviarme el camino, hacerme caer, engañarme con su astucia y el mármol,aunque aparente resistencia, sabemos que cualquier golpe lo haría desaparecer quedando totalmente destrozado en el suelo.
No esperen que narre hasta el más ínfimo detalle de mi existencia ,al contrario, serán pinceladas o exposiciones de Picasso, cuerpos geométricos incomprensibles, no digo que vaya a ser lectura mediocre o que deje gusto a poco en el paladar, sino que me refiero al enfoque que tome, ya que, serán desde muchos ángulos, demasiadas temáticas aparecerán y desbordarán tu corazón.
